Nos hemos encontrado con grandes hoteles, que tienen numerosos clientes, y nos hemos sentido un número, el número de nuestra habitación. Creo que deberían hacer un esfuerzo por personalizar la experiencia, preguntar los gustos de los clientes, y satisfacer al menos uno. Dejar notas escritas a mano dando la bienvenida personal al huésped, llamarlo por su nombre.Creo que esto hace que te sientas valorado y a gusto, y que posiblemente repitas la experiencia.
