
Se pone a disposición del huésped que lo desee un libro llamado 'Eurohistorias de [nombre del hotel]', donde cada uno debe añadir dos páginas al menos, al texto escrito por los anteriores huéspedes, en forma de narración libre y espontánea. Resulta sugerente la idea porque atraería la creatividad e imaginación de los participantes, resultando una narrativa inimaginable y singular, que podría reunirse al finalizar cada año en una hemeroteca para los clientes de la cadena.