Por un lado, a traves de un sencillo cuestionario al hacer la reserva, tener adecuado el mini bar a los gustos del cliente. Para ello tener una serie de lotes con los productos más comunes a gusto de los clientes y según ese cuestionario, antes de llegar el cliente introducir esos productos en el minibar. No haría falta personalizarlo, si no tener unos 10 lotes diferentes amoldadas a los gustos más comunes.
Por otro lado, tener en los productos unas etiquetas especiales, para una vez sacado el producto y degustado,cargarlo en cuenta, para no dar lugar a equívocos.